• El colmo es que el escuadrón armado, pasó el puesto de control tabasqueño como si nada, donde estaban ‘reteneando’ policías estatales y ministeriales
  • El agente asesinado pertenecía a un primer retén policiaco, a unos 30 metros de donde estaba con Juan Carrillo, en un desayunadero de Reforma, municipio gobernado por ‘La Bronca’, y ninguno de sus compañeros accionó sus armas para repeler el ataque; el comando huyó rumbo a Tabasco

Por Isaac Mendiola/SFAS/ Reforma, Chiapas; 2 de junio del 2023.- Chiapas sigue en la nota roja. En medio de una lluvia de balas, un escuadrón armado que se transportaba en camionetas blancas, llegó hasta el lugar conocido como Halliburton.

Ahí se encontraba el líder sindical Juan Carrillo Hernández, a como de costumbre, ya que llegaba a supervisar las cuadrillas que pertenecen al sindicato de la CTM y que prestan servicios a la mencionada empresa transnacional.

Según testigos, el policía asesinado a balazos por el escuadrón armado, era amigo del líder sindical y antes de los hechos, se encontraba reteneando con sus demás compañeros a unos 30 metros más adelante de los hechos.

Según señalaron varios obreros, Juan Carrillo llamó al policía y le pidió subir a su camioneta, para invitarle un café; cuando ambos estaban dentro de la unidad, llegó el escuadrón armado y se bajaron haciendo disparos al aire para que ningún obrero interviniera.

Acto seguido, al líder sindical lo bajaron de la unidad con lujo de violencia, mientras que al policía le dieron de balazos y lo dejaron muerto en el lugar del desayunadero de dicho lugar.

El escuadrón una vez que levantó a Juan Carrillo, emprendió la huída, pasando por el primer retén policiaco, donde según testigos, los policías, que portaban armas largas y cortas, no hicieron ningún disparo por lo menos para vengar la muerte de su homólogo, por el contrario se abrieron para que pasaran los delincuentes.

Los criminales pasaron el otro filtro que está en la glorieta Boca de Limón, donde hay más policías chiapanecos y que es la raya con Tabasco, es decir, no recibieron llamada vía radio avisando de los hechos o tampoco quisieron actuar.

Por último, el escuadrón cruzó la línea divisoria de Chiapas y Tabasco, pasó a plena luz del día el otro puesto de control tabasqueño y se internó a la cabecera municipal de Centro.

De esto, ambos gobiernos estatales morenistas, guardan silencio cómplice.

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