- Los resultados en los estados más competidos podrían tardar días en llegar al Colegio Central
Por Agencias SFAS|| Washington, DC.- Las elecciones en Estados Unidos confirman, al menos en la Cámara de Representantes, que la marea roja se imponía, mientras en el Senado se mantenía una reñida competencia.
En el Senado de Estados Unidos, de acuerdo a las proyecciones, los republicanos aparecen con una ligera ventaja de 48 escaños frente a los 47 que tienen los demócratas, pero todavía quedan por decidir cinco contiendas, las de Wisconsin, Georgia, Arizona, Nevada y Alaska.
Los resultados, particularmente en los estados más competidos, podrían tardar días en llegar, una realidad que genera preocupación por la posibilidad de que la desinformación y las teorías de la conspiración generen tensiones o incluso brotes de violencia.
Florida fue uno de los casos más claros del tsunami republicano, con el triunfo indiscutible del gobernador Ron DeSantis y del senador Marco Rubio, el primero se convirtió en automático en competidor por la candidatura presidencial, que le habrá de disputar a Donald Tump que quiere regresar por sus fueros.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, se impuso al demócrata Beto O’Rourke, quien venía acercándose en las encuestas, pero no logró superar a su contendiente.
En Nueva York, bastión tradicional demócrata, la gobernadora Kathy Hochul logró una simbólica victoria frente al republicano Lee Zeldin.
Los demócratas arrebataron a los republicanos al menos dos gubernaturas: la de Maryland y la de Massachusetts, que tendrá en Maura Healey a su primera gobernadora abiertamente homosexual.
En la Cámara Baja, donde estaban en disputa los 435 escaños, los republicanos acumulaban 219 escaños, contra 204 de los demócratas
Aunque la situación es más compleja en el Senado, donde los demócratas defendían cada escaño. Hasta anoche, los republicanos acumulaban 49 asientos, por 48 de los demócratas. Para lograr la mayoría, se requiere de 51 escaños o 50, en el caso de los demócratas.