*Desde boletines cargados de discursos de odio, hasta la cancelación de eventos, creación de cuentas falsas, cacería y amenazas a simpatizantes del que se ha convertido en un símbolo de esperanza para miles de priistas
Por Dominga Calles Alatorre/Chetumal, Quintana Roo.- Nunca como hasta ahora se ha notado el miedo a la derrota en los que creen tener el control de las decisiones en la selección del mejor contendiente para llevar el estandarte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Quintana Roo, un solo hombre, Carlos Joaquín González, se ha convertido blanco de todo tipo de agresiones y violencia por parte de quienes se saben perdedores.
Este miércoles la guerra sucia levantó su coladera y empezaron con más agresividad los ataques.
Desde su cuenta oficial de Twitter, Carlos Joaquín González, denunció tales agresiones y se preguntó: “Esto es unidad y respeto”, al mostrar la revelación del contubernio de dos delegados quintanarroenses en su contra.
La secretaria del Comité Directivo Estatal del PRI, Leslie Baeza Soto quien aspira a otra vez ser diputada local y por ello ha sido vapuleada por la militancia femenina priista de la entidad, pidió “Respeto, prudencia, madurez y responsabilidad política a Carlos Joaquín”, pero no dejó de agredirlo y lanzarle de nueva cuenta falsas acusaciones.
Más tarde el contador público adelantó que hay una nueva oleada de agresiones hacia él: “¡Me avisan que viene más guerra sucia! Ahora preparan grabaciones y audios editados para calumniarme a mí, a mi familia, amigos y colaboradores. Quintana Roo no necesita este tipo de campañas sucias que solo provocan la polarización de un proceso que debió haber sido democrático”.
“Se los dije. Así iba a ser. La verdad siempre estará por encima de las mentiras y trampas para mantenerse. Veánlo ustedes”, agregó en un nuevo mensaje emitido esta misma noche.
La persecución gestada desde el poder público en Quintana Roo, incluye en su ofensiva a cualquier trabajador del gobierno estatal o municipal que tenga la osadía de dar un “Me gusta” o un “RT” a las cuentas en redes sociales del político. Son ubicados, contactados y amenazados con perder su trabajo o el de sus parejas inmediatamente. A ese nivel esta el miedo de que no sea impuesto el “Delfín”, que el gobierno aplica terrorismo en la gente de Quintana Roo.
También hay un grupo de personas, en su mayoría jóvenes sobrevaluados que cobran fuertes sumas de dinero proveniente de recursos públicos que se dedican a crear cuentas falsas en redes sociales, a aplicar ciber agresiones –trolls-, a inflar con “RT” y “Likes” falsos cualquier texto oficial que se emita, aplaudidores pagados, pero también perros de cacería, ellos son los que rastrean permanentemente las redes sociales y hacen listas de la gente que van a despedir de gobierno porque han tenido el atrevimiento de usar una libertad que esta censurada en Quintana Roo: la de expresión.
Estos creadores de bots y cuentas falsas, buscan engañar a los ciudadanos quintanarroenses, atraen con mentiras hacia perfiles que crean en redes sociales suplantando la identidad de Carlos Joaquín González, con el fin de detectar a sus simpatizantes y perseguirlos en todo lo que puedan.
Manejan en las cuentas de bots y trolls, lenguaje soez, misógino, de odio a la mujer, esa indicación es la que tienen, por eso les pagan con recursos públicos estatales. El especial repudio a las mujeres en sus textos hace pensar que él que ordena su contenido esconde su verdadera sexualidad en un closet.
La forma correcta de evadir a este grupúsculo de agresores es no seguir a ninguna cuenta que no esté verificada por la red social, es decir, no seguir cuentas que no tengan la famosa palomita azul.
Este miércoles se reveló una conversación entre Fabián Vallado, Delegado de Sedesol y Ulises Ruiz, Delegado del PRI en la entidad, en dicha plática ambos funcionarios en contubernio fraguan estrategias para “parar” a Carlos Joaquín González, hablan también de la urgencia de Raymundo King de la Rosa, presidente estatal del PRI, por “amarrar a los seis” aspirantes oficiales y sentirse triunfador por eso.
Lo anterior se da en Quintana Roo, aún cuando a nivel nacional viajan cada tanto los líderes locales a buscar la “bendición partidista”, con demagogia cargada de falsa unidad mientras esconden la piedra con la que laceran la democracia en este que es el último estado en definir a su candidato a Gobernador.